El “ser” de Gorgias de Leontinos
Aunque el nihilismo es un concepto relativamente nuevo y que se consolida por Friedrich Nietzsche, lo cierto es que el término apareció mucho antes del post estructuralismo y se remonta a épocas de la construcción de la lógica griega.
Gorgias de Leontinos puede ser considerado el padre de la falsación de Popper, la duda metódica de Descartes y el nihilismo postmodernista.
Su teoría, que puede parecer una parafasia del concepto del “Ser” de Parménides, no es otra cosa que la destrucción de lo sólido resumido en la negación total a todo.
Para Gorgias el “ser” y el “no ser” no son nada.
En el caso del “no ser”, no existe en cuanto no es sujeto de verificación y tautológicamente hablando el no es, es una nada.
En cuanto a la existencia, lo que es necesariamente deviene del “ser” o del “no ser”. Por obvias razones del “no ser” no puede desembocar, pues no es nada y de lo que es no puede ser, porque el “ser” es determinado y no puede responder a algo más grande que él, pues de hacerlo ya no sería.
Además, el “ser”, asegura Gorgias, tiene como característica la infinitud y eso cae en una contradicción, pues el infinito no es susceptible de refutación y eso significaría que el ser humano jamás cometería errores, lo cual es falso.
Asentando la confusión anterior y este trabalenguas, hagámosle más simple la afirmación. Lo que plantea Gorgias es que nada existe. Esto incluye conceptos, realidades, esquemas, estructuras y paradigmas.
Si es que algo de esto existiera no podría ser explicado por el hombre quien no alcanza a apropiarse de una realidad, pues el conocimiento infinito es característica divina y el humano constantemente es refutado, por lo tanto no hay forma de conocer la verdad.
Finalmente, Gorgias considera que si alguien logrará construir la teoría final no podría comunicar a otra persona, pues, entre otras cosas, carecería de evidencias para convencer, retóricamente a alguien, de la verdad única que ha conseguido aquel erudito.
Estas premisas se engloban en tres conceptos que son sus premisas fundamentales:
1. nada es (existe)
2. Si algo existiera, sería incognoscible
3. Si fuera conocible, sería incomunicable
El que lea a Gorgias tendrá una buena excusa para defender el escepticismo a los metarelatos construidos en la actualidad y puede refutar los paradigmas más dogmáticos.
Sin embargo, Gorgias al igual que el verdadero nihilista constituye su escepticismo en una suerte de alimentación a la dialéctica, como generación de nuevo y mejor conocimiento.
También lo hace pensando en ironía a los que creen saberlo todo, a los llamados pseudointelectuales de pensamiento fuerte.
Finalmente, sin ridiculizar a la teoría, destruye las sectas capitalistas y comunistas que tanto están de moda para muchas personas.